viernes, 10 de septiembre de 2010

Cuando solo te toca ser el espectador.

Hay muchas ocasiones -como hoy- que no sé que es lo que tengo que hacer, lo que me corresponde... hoy no sé  cuál es la palabra adecuada, la acción concreta que me ayude en algo, a quién le debo de pedir o qué es lo me pueda servir...

Hoy siento la impotencia de no poder hacer nada; trato de que mi vida pase normal y que la cotidianidad llene un poco el dolor de no saber que hacer, que sin querer la respuestas aparezca por arte de magia y no salir corriendo como un loco, sin saber hacia donde me dirijo o a quién dirigir mi grito de ayuda.

Puedo buscar culpables, pero no creo que eso ayude mucho; puedo gritar al Cielo y pedir una explicación, pero no creo que la vaya a recibir; puedo buscar los "por qué's" pero tampoco creo que eso remedie lo que esta pasando; puedo prometer que si hay una nueva oportunidad, no lo volveré a hacer, pero sé bien que tampoco eso ocurrirá... la verdad es que siempre es mas fácil hablar y decir "todo estará bien" cuando no estas en los zapatos en que ahora me encuentro.

Ayer por la noche mi mamá habla...

- Hijo, tu abuelito se pudo mal, lo están llevando al hospital...
- Pero, ¿qué le pasó?
- No saben, nada mas dicen que se puso mal y que se siente un poco desesperado; solo te pido que hagas una oración por el.
- Ok.
- Te mantengo informado...
- Gracias, nos vemos.

¿Qué es lo que debo hacer? dejar todo para salir corriendo a su encuentro; para que un doctor, un enfermero o hasta un guardia, me diga en la puerta que no puedo pasar, dejandome solo a unos metros sin saber que pasa con él...

¿Debo esperar en casa? para aparentar que no pasa nada, mientras los que están con el, no saben qué hacer, con quién compartir el dolor, con quién compartir el desvelo...

¿Debo orar para tratar de que Dios me escuche? buscando una vos interior que me diga "todo esta bien" sin saber si es mas mi fe en creer eso o realmente recibí una respuesta divina...

Ayer por la noche soñé con el, y lo tomaba de un brazo mientras le decía "por favor, cuídese..." y el solo me volteaba a ver mientras me asentía con la cabeza; maldita lluvia que me despertó de mi sueño y no pude hablar mas con el. Trate de re-acomodarme para ver si retomaba mi sueño, si la comunicación se volvía a restablecer... pero nada... siempre lo logro, pero supongo que la línea estaba ocupada con tanta gente tratando de comunicarse con el, pidiendo por él.

Sé que las cosas estarán bien, por lo pronto solo estoy como buen soldado... siendo paciente, esperando y deseando solo lo mejor...



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