Tengo un pequeño problema en mi cabeza -entre muchos otros- que me atormenta cada vez que fallan las cosas necesito saber por qué...
Supongo que tiene que ver con mi TOC (trastorno obsesivo compulsivo), que me obliga a darle 20 mil vueltas en mi cabeza hasta que doy con alguna respuesta que me parezca satisfactoria.
Una de las últimas casos fue con mi pluma fuente; no saben de la dicha que siento cuando escribo con ella... la forma en que suena, la forma en que se desliza sobre el papel, incluso hay un olor muy peculiar que en ocasiones percibo al escribir. Es una de esos pequeños gustos que nos damos quienes nos gusta escribir cada que podemos.
Como es de esperarse, no es un objeto con el cual todos crecimos casa, no todos los padres cuentan con uno y quienes sí, lo cuidan tanto y lo mantienen lejos de sus hijos cuando pequeños. Así es que al ser mi primer pluma por el estilo, compré una de precio promedio, ni barata, ni cara, no quería hacer un gasto excesivo si luego descubriría que no lo disfrutaría tanto como esperaba y probablemente terminaría en el fondo de un cajón o de una caja.
Así es que con toda la emoción del mundo comencé a utilizarla apenas me llego; día con día me fui acostumbrando a su uso y fui haciéndome adicto a sus características que ya fueron mencionadas, incluso disfrute mucho el ir a la papelería por un paquete de cartuchos al acabarse los que venían incluidos con la pluma.
Todo viaje comienza con el primer paso y cada paso lleva su aprendizaje...
De pronto un día comenzó a fallar, recurro a los remedios mas comunes para los problemas mas comunes -valga la redundancia; checo nivel de tinta y todo bien, humedezco la punta, pues es posible que una sección de la punta se haya secado y no permita el flujo de la tinta, pruebo nuevamente escribir y funciona. Al principio funciona, pero después de un rato el problema vuelve a presentarse; imagino que quizá necesita un poco mas de humedad y repito en mas de dos ocasiones -por lo menos- todo, al menos para terminar la idea de lo que estaba escribiendo, aunque para ser sinceros, yo ya no lo estaba disfrutando, en ocasiones parte del escrito eran ya ilegibles. Apenas terminé me puse a ver tutoriales de como hacerle una limpieza mas exhaustiva, porque como ya lo dije, soy nuevo en esto.
Así es que ahí me tienen a mi, aprendiendo sobre los diferentes componentes de la pluma, las ventajas y desventajas de utilizar cartuchos desechables o el depósito que podemos rellenar con mucho cuidado, de los líquidos para limpieza que algunos recomiendan y de los que no, los colores que puedes utilizar, los precios de las plumas, incluso el manejo que debemos tener cuando vamos en avión por el cambio de presión que las plumas -como nosotros- podemos experimentar.
Hice limpieza de la pluma en mas de dos ocasiones y obtuve los mismos resultados; comenzaba a escribir bien y luego volvía a fallar, así es que me aventé mucho mas tutoriales convencido de que en alguno daría con la solución al problema; incluso hasta en determinado momento pensé seriamente en comprar una máquina ultrasónica que me ayudaría a limpiar restos de tinta seca del despachador de la pluma; comencé a justificar el gasto, con la promesa de que seguramente a mas personas a mi alrededor les pasaba o pasaría lo mismo y ahora yo ya podría ayudar a resolver el problema, así es que ya me había dado el permiso a mi mismo.
A estas alturas del partido, cualquier persona normal ya se hubiera dado por vencido o incluso ya hubiera comprado otra pluma, pero yo no y ya establecimos que puede ser un poco/mucho obsesivo cuando no doy con el problema, pues al no saber qué fue lo que paso, es muy probable que me pueda volver a pasar y no quiero que después de X años esté yo en mi casa rodeado de muchas plumas fuente que fallaron y que no pude reparar, para que en mi lecho de muerte y a punto de dar mi último suspiro, se me acerque el novio tonto de mi pequeña nieta -a quien adoro con todo mi corazón- y diga algo así como "a tu abuelo le gustaban mucho las plumas fuente verdad? pero me doy cuenta de que a ninguna le quito el __________ (ponga aquí un ejemplo de solución ridículamente tonta) y que de pronto todas comiencen a funcionar y ello me hará hacer un último coraje que determinará si voy al cielo o al infierno y no crean que estoy exagerando, todo eso puede llegar a pasar por mi mente, así es que ya se podrán dar una idea de las cosas que puedo visualizar y mi problema con ello.
Pero ya a punto de darme por vencido y ya con mis papeles en mano que me avalan como experto en limpieza de plumas fuete en todo el norte del país, se me ocurrió una solución extrañamente simple... "y si simplemente cambias el cartucho de tinta -que quizá por X motivo- que quizá salió defectuoso"...
Y pues nada, aún hay ecos de risa en mi cabeza desde que comencé a escribir este blog.
Hasta pronto... bye.
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