martes, 24 de marzo de 2020

nuestra mejora...



Mucho se habla de los negocios, empleos y economías que afectará la situación por la que actualmente estamos atravesando, pero poco se habla de las oportunidades y de las carencias que nos llevaron a ella...

Muchos de los negocios siempre han visto en los clientes a alguien que depende de ellos, cuando es todo lo contrario; las vacas gordas son para prever situaciones que pueden presentarse, no hicieron planes de contingencia y mucho menos ahorros que tuvieran en cuenta tanto dinero para el mismo como para los empleados afectados por la situación. Siempre vieron la abundancia como un punto de orgullo malentendido y mal llevado a cabo.

Ahora mismo se menciona de negocios que están ayudando a sus empleados con despensas y depósitos, que bien no compensan las propinas o extras que se adquieren, por lo menos no carecerán de dinero para solventar sus necesidades básicas y todo ello es aplaudido por la sociedad, pero... y los demás negocios? estamos hablando de un porcentaje muy bajo, casi imperceptible, casi nulo, es por ello que llama la atención. Muchos de los negocios están, sino obligando a sus empleados, poniéndolos en una situación de "espada contra la pared" para seguir trabajando, porque no hablan de ayuda, pero si de responsabilidades y es ahora cuando el negocio es quien debe de ponerse la playera del mismo negocio, porque los empleados son también la empresa. No escucho hablar de las responsabilidades que adquiere el negocio para con el empleado y si, el tema no es nuevo, pero si es cuando se nota mas la ausencia de regulación de los mismos, sé que las leyes existen, pero no que se lleven a cabo. La constitución de un país, que debe regir el buen común de la sociedad; las leyes que regulan el bienestar entre individuos y demás, solo son papeles con tinta y firmas si no se llevan a cabo, un papel mas sin valor.

Espero que los negocios salgan o salgamos de ésta, pero no con desesperación, sino con una nueva perspectiva, de lo que hacen, de lo que pueden hacer, de lo que se dedican y de las piezas por las que están conformadas, todas y cada una de ellas tan vital como la otra. Con una nueva atención hacia el cliente, porque todos aquellos negocios que se durmieron en "sus laureles" es probable que así queden y los que bien o mal se prepararon, es probable que salgan, raspados, pero salgan al fin.

De todo se aprende, con una buena actitud, hasta de los malos momentos... 


No hay comentarios: